domingo, 27 de noviembre de 2011

Como dijo Amy... Love is a losing game

Por primera vez creí poder alejarme de ese sentimiento que me persigue como si yo fuera su carnada, es difícil explicarlo, no quiero ser la carnada es confuso dentro de mi, mi interior convaleciente quiere salir y se mueve sin control, pierdo la coherencia de mi vida ¿Preparada para lo peor? No, estoy decidida renuncio, siempre me costo ser arriesgada, la vida necesita adrenalina y que más adrenalina que ahora, decidir dejarlo todo, abandonar lo seguro como el trapecista y lanzarse a la nada aun sabiendo que te espera algo que te salvara del otro lado. Bendito aire que constituyes la atmosfera de la tierra, que nos mantienes vivos, ayúdame trae una brisa que sirva para cambiar la visión física que tengo de mí y así ver si cambia mi esencia frágil e insegura.

Me ataca un trance de pensamientos ilógicos, nace la pregunta frecuente ¿Cómo sacarte de mis decisiones? y el miedo me inunda ¿Si te saco de mi cuerpo y ya no vuelvo a sentir? Mantente lejos, déjame en paz, se mi amigo y no huyas, definitivamente no me conformo, no quiero detenerte, reparemos nuestra mente para sanar al cuerpo y darle al alma un buen hogar. Dejo todo y no sigo, es inexplicable aceptar reglas y consecuencias de un juego que quiero perder todo el tiempo ¿Llegue lejos? ¿Me rendí muy rápido? ¿Cuánto falta para el final? ¿Quédate conmigo hasta encontrar el final del arcoíris? ¿Te decepcione? ¿Somos fuertes? Dime en que momento dirás que te encanta cuando muerdo mis labios de nervios, cuando me rio de nervios, cuando te toco y me quemo de nervios. Rómpeme, déjame tirada en el piso del baño para que alguien más vuelva, me mire, me levante y me repare. Luche por no caer, quede con hematomas en todo mi cuerpo, sin embargo, aquí me encuentro de rodillas a tu lado viéndote dormir con tus ojos en otro mundo, pareces un niño miedoso acurrucado, como te explico que esto duele, que realmente duele. Lo siento… Perdí.

sábado, 12 de noviembre de 2011

Vuelve a mirarme

Un pequeño hormigueo y comencé a bajar y a bajar, de repente un día deje de percibir si sigo bajando o si estoy subiendo, se volvió imperceptible para mi estomago, me acostumbro o me detengo. Mis problemas comienzan a ser internos, el mundo ya no interviene y me doy cuenta que el problema es mío, de nadie más, desde ese momento no dejo de pensar, no puedo dormir, mi cama es interminable, mi sueño esta a la vuelta de la esquina, me siento indefensa dentro de este cuerpo que no es mío, pero esta conmigo siempre. Dejo el miedo de lado y aparece la culpa, no quiero herirnos, no quiero un choque frontal que destruya nuestra esencia. No quiero la inmortalidad si tengo que despertar todos los días sola junto a mí. 
Tócame, hazme sentir que estoy viva, que no me estoy perdiendo en un lugar imaginario, que no me estoy perdiendo la vida, porque sigo con vida a pesar de esta muerte tan pronunciada que siento. Dulce utopía enséñame su significado, disfrutemos el mundo loco que nos espera, necesito arriesgarme y correr sin frenos con todos los semáforos en rojo ¿Volvamos a soñar? miremos juntos por este caleidoscopio sin figuras, ni colores, recuérdame. Sonríe, cubre mis ojos y déjame caer al suelo para tomar vuelo y volver a subir, porque sé que puedo volver. Vuelve a mirarme besa el lunar de mi mejilla, dibújalo en tu mente, no lo borres, mantenlo ahí para siempre, déjalo descansar y vuelve a mirarme. Saca de tu perspectiva mi mirada, mis ojos color nada, mis labios nerviosos y vuelve a mirarme. Idealízame, ilusiónate, entiérrame en el cementerio de tu memoria, llora descontroladamente por mí y vuelve a mirarme.
Quiero que tu fotografía quede impregnada en mis manos, que sean las líneas que marcan mi vida, mi presente y mi pasado y que cambiaran con el futuro. Hazme entender esta esquizofrenia que me mantiene cuerda. Quítale el freno de mano a esta vida tan estancada que llevo. Toma mi codo, aléjame del huracán interno y hazme sentir fuerte para alejarme de estos pensamientos que no dejan respirar. Recíclame y vuelve a mirarme.